El gobierno de Brasil comenzará a aplicar las mismas normas que exige España a los ciudadanos brasileños para entrar en los países del espacio Schengen.
La nueva medida, aplicada en el regimen de reciprocidad, señala que a partir de este lunes de Semana Santa, los viajeros de nacionalidad española, no necesitarán visado para entrar en Brasil, pero deberán exhibir un pasaporte con validez mínima de seis meses; un billete de regreso con fecha confirmada; 70 euros por cada día de permanencia dentro de territorio brasileño, más la reserva del hotel abonada o garantizada o en su defecto una carta de invitación de alguna persona o entidad de Brasil, con certificación notarial.
Las autoridades de Brasil, no imponen estas condiciones de acceso a turistas procedentes de otros países de Europa









