Ecuador: decretan estado de excepción por proceso eruptivo del volcán Cotopaxi

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Escondido entre sus fumarolas de ceniza y vapor, el volcán Cotopaxi tiene vigilancia permanente en previsión de cualquier eventualidad extrema. Foto: Carlos Rodríguez/Andes
Escondido entre sus fumarolas de ceniza y vapor, el volcán Cotopaxi tiene vigilancia permanente en previsión de cualquier eventualidad extrema. Foto: Carlos Rodríguez/Andes
Quito, (Andes).- El presidente Rafael Correa firmó este sábado el decreto que establece la entrada en vigor del “estado de excepción” en el país a causa de la inusual actividad del volcán Cotopaxi, el más alto del mundo con 5.897 metros sobre el nivel del mar y a 45 kilómetros de Quito, y que señala, además, la censura previa para la información relativa con esta emergencia.
“Ese decreto me permite movilizar recursos financieros de cualquier sector, excepto de educación y salud, para atender la emergencia, movilizar recursos físicos, incluso privados, buses, etcétera”, aseveró el mandatario desde Pimampiro, en la provincia de Imbabura, donde rubricó el documento.
El secretario jurídico de la Presidencia, Alexis Mera, leyó el decreto número 175, mediante el cual queda establecida la medida por la “inusual actividad del Cotopaxi”, considerando que el viernes se registraron cinco explosiones en ese nevado, ubicado en la provincia de igual nombre.
Precisó que esta medida estará vigente “todo el tiempo necesario para enfrentar el proceso eruptivo del volcán Cotopaxi, pero no podrá extenderse por más de 60 días, de conformidad con lo dispuesto en el artículo 166 de la Constitución de la República”.
Argumentó que el día de hoy se reportaron nuevas explosiones con la presencia de flujos piroclásticos en la zona occidental del volcán, lo cual podría producir eventualmente lahares y el derretimiento de la zona alta del glaciar volcánico, hecho que obligó a la evacuación de las poblaciones aledañas, que comprende las zonas del río Pita, Mejía, del Pedregal, Santa Clara y de las riveras del Cutuchi.
Según el documento, tales explosiones son de carácter freático, comunes en la etapa de reactivación de los cráteres, que producen sismos y fracturan el conducto volcánico, y añade que la situación del volcán constituye una grave amenaza por lo que hace necesario que el gobierno nacional tome medidas urgentes y es excepcionales para enfrentar la grave conmoción interna que podría traer este proceso de llegar a concretarse.
Alerta, además, a la ciudadanía de seguir las recomendaciones de los canales oficiales para que se garantice la seguridad a los habitantes, lo cual es obligación exclusiva del Estado, por lo cual insta a no atender a falsos rumores y alarmas que podrían estar circulando en las redes sociales y medios no oficiales, lo cual, apunta, podría ocasionar un daño superior del que se pretende evitar.
Última hora
Cotopaxi está en calma y sus habitantes hacen votos por la Virgen de la Merced ante el acecho del volcán
Según destaca la enviada de la agencia Andes a la zona:
e siente más frío que de costumbre, pero en Latacunga, la ciudad capital de Cotopaxi, provincia que lleva el nombre del volcán que ahora acecha, la vida pareciera normal, con una calma aparente que solo rompen los claxones de los autos o los fuegos artificiales que un grupo de habitantes han lanzado este sábado para que la Virgen de la Merced les proteja de una eventual erupción del nevado.
Según dicen algunos moradores de esta ciudad, a unos 45 kilómetros de Quito, la tradición de la fiesta en honor a esa virgen es siempre en septiembre, pero dadas las circunstancias es preciso lanzar petardos, para que “ayude” a que se vaya la mala vibra.
Hace poco más de 48 horas comenzaron a registrarse explosiones desde el interior del cráter, luego que desde abril comenzara a echar fumarolas de ceniza y vapor, que también ha desprendido en los dos últimos dos días, lo que llevó a que el gobierno decretara el “estado de excepción” para todo el país ante la “inusual” actividad del volcán.
El Cotopaxi es el más alto del mundo, con 5.897 metros sobre el nivel del mar, y mantiene su cúspide nevada, por lo que la presencia de flujos piroclásicos en la zona occidental del volcán, podrían ocasionar lahares y el derretimiento de la zona alta del glaciar, lo cual sería una grave amenaza para las poblaciones aledañas, que han sido evacuadas de manera preventiv