El 17 de junio, la Asociación Global de Energía presentó su tercer informe anual 10 ideas innovadoras en energía para los próximos 10 años preparado con la participación de científicos de Grecia, Emiratos Árabes Unidos, Rusia, EE. UU. y Suiza. La presentación del informe se realizó en la sesión Los Desafíos Globales del Balance Energético 2022, en el marco del Foro Económico Internacional de San Petersburgo (SPIEF-2022).
La mayoría de los capítulos del informe tratan sobre los desarrollos en nuevas energías, que pueden encontrar su aplicación comercial en las próximas décadas. Entre ellos se encuentra el combustible amoniacal bajo en carbono, que podría convertirse en una alternativa al fuel oil y al gas natural licuado (GNL) en el transporte marítimo, las tecnologías de ciclo nuclear cerrado, que permitirían la reutilización del combustible nuclear, y las células fotovoltaicas de perovskita, que podrían aumentar drásticamente Eficiencia de la generación de energía con paneles solares.
El informe de 2022 incluyó, por primera vez, un capítulo escrito por los finalistas del programa Young Scientist 4.0 que la Global Energy Association lleva a cabo en cooperación con PJSC Gazprom para apoyar a los profesionales talentosos de la industria. Su capítulo describe los problemas de almacenamiento de hidrógeno y el uso de sistemas inteligentes para el transporte de gas.
“Algunas de las innovaciones contenidas en el informe permitirían aumentar la demanda de fuentes de energía tradicionales en la era baja en carbono: estas incluyen capturar dióxido de carbono del aire y producir hidrógeno a partir del metano de las minas”, dijo Sergey Brilev, Presidente de la Asociación Global de Energía.

“Existe un consenso cada vez mayor de que la adopción del hidrógeno, tanto azul como verde, se acelerará entre 2022 y 2030 a medida que tomen forma la oferta y la demanda ”, dijo Steven Griffiths, uno de los autores del informe, vicepresidente sénior de investigación y desarrollo y profesor en ejercicio. en la Universidad de Ciencia y Tecnología de Khalifa. “El patrón general para la adopción de hidrógeno verde y azul será la adopción primero en grupos industriales que respaldan actividades como la producción de productos químicos, la refinación, la producción de hierro y acero y el transporte marítimo de larga distancia. A medida que el uso de hidrógeno en dichos grupos estimula el aumento de la producción de hidrógeno verde y azul, los costos de producción disminuirán y permitirán que otros sectores e industrias también utilicen hidrógeno descarbonizado sobre una base competitiva en costos. Si se adopta ampliamente la baja y cero emisiones de carbono en todo el sector energético mundial, para 2050 las emisiones de carbono mitigadas atribuidas directamente al uso de hidrógeno podrían alcanzar del 5 al 10%”.