Cuba autorizó a la institución financiera Orbit S.A (creada en La Habana) para que gestione las remesas, realice otras operaciones de transferencia y sea la eventual contraparte de Western Union en la nación caribeña, para que los cubanos residentes en el exterior puedan retomar el envío de dinero a sus familias en la isla.
Orbit S.A reemplaza en el rol a Fincimex, la entidad que por 20 años fue la contraparte de Western Union, hasta que el gobierno de Estados Unidos la colocara en su lista negra, lo que interrumpió la operación en la isla.
La Gaceta Oficial publicó la resolución firmada por la presidenta del Banco Central de Cuba (BCC), Martha Sabina Wilson, de aceptar la solicitud de Orbit S.A de “gestionar y tramitar transferencias internacionales desde el extranjero hacia Cuba” y “prestar servicios de pagos desde el extranjero a través de su infraestructura”.
Hasta noviembre de 2020 las remesas eran operadas por Western Union con Fincimex, pero en el marco del endurecimiento de las sanciones de Estados Unidos a la isla, en octubre de ese año el gobierno del entonces presidente Donald Trump canceló el permiso para la empresa de su país e incluyó a Fincimex en un listado de empresas restringidas argumentando que la contraparte cubana formaba parte de un conglomerado bajo administración militar, de acuerdo a la información de La Voz de América a través de AP.
Hasta el momento no es claro el origen de la firma Orbit S.A salvo por el hecho de que la resolución del BCC indicó en sus consideraciones que fue constituida el “3 de febrero de 2020 con sede en La Habana”.
Tampoco quedó inmediatamente esclarecido si Western Union retomará su acuerdo con la isla con esta nueva institución financiera o cuándo se hará efectivo el ingreso de remesas.
Las Fuerzas Armadas de Cuba se quedan con una parte de las remesas que reciben los cubanos
El 24 de octubre de 2020, el gobierno de Trump emitía un comunicado donde expresaba que:
“Estados Unidos apoya el principio de que los cubanos deben tener la posibilidad de prosperar y ayudar a sus familias sin que los militares cubanos usen a su arbitrio sus ingresos en moneda fuerte. El gobierno y las fuerzas militares de Cuba han creado un sistema que se apropia de la moneda fuerte a través de mecanismos financieros operados por las fuerzas militares, como FINCIMEX y AIS, y toma una porción de las remesas que los ciudadanos comunes de Cuba reciben desde el exterior, incluidas las provenientes de Estados Unidos. Cuba es el único país en el hemisferio donde las fuerzas militares se quedan con una parte de las remesas. Además, el régimen cubano obliga a los cubanos a usar las remesas que les quedan para comprar artículos con sobreprecios en tiendas que controla el gobierno”, explicaba el comunicado del Departamento de Estado norteamericano.