El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, defendió que el rango de exención del Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IPRF) sea incluso superior a los 5 mil reales prometidos a su gobierno durante la campaña presidencial. Según Lula, la ampliación de esta gama va mucho más allá de un compromiso de campaña. “Es un compromiso con la justicia”, dijo el presidente, afirmando que esto será posible gravando a los súper ricos.
“No se puede hacer que las personas que ganan R$ 5.000 (unos 890 dólares) paguen impuesto a la renta, mientras que quienes tienen acciones de Petrobras y reciben R$ 45 mil millones en dividendos no paguen impuesto a la renta”, dijo el presidente durante una entrevista con Rádio O Povo, en Fortaleza.
Entre los argumentos presentados por el presidente está el hecho de que los trabajadores pagan proporcionalmente más impuestos que los ricos. Sin embargo, destacó que este es un debate que debe realizarse de manera transparente y abierta a la ciudadanía, y que la gente debe saber quién paga qué y cuánto se paga en impuestos.
“Eso es lo que falta en este país”, dijo el presidente. “No se puede cobrar el 27% o el 15% a un trabajador que gana R$ 4.000 y dejar sin pagar a los que ganan [mucho más]. Lo que queremos es eximir a aquellas personas [que ganan] hasta R$ 5.000 y, en el futuro, eximir más porque, en mi opinión, el salario no es ingreso. El que tiene ingresos es el que vive de la especulación”, añadió.
Aplicaciones
Lula también defendió la implementación de políticas que consideren nuevos mercados laborales que consideren, en particular, profesiones y tecnologías que favorezcan el espíritu emprendedor de los ciudadanos.
“Hay un nuevo tipo de trabajador por el que debemos preocuparnos. Este es, por ejemplo, el caso de las personas que trabajan en aplicaciones. Es un público que no tiene sindicato; que no quiera tener una tarjeta profesional firmada. Muchos no quieren tener un contrato formal. Por lo tanto, tenemos que preocuparnos por ellos en materia de seguridad social, porque este ciudadano podría enfermarse; puede tener desgracia. Y envejecerá. Necesitamos una garantía para que tome precauciones”, afirmó el presidente.
Lula defendió un proyecto de ley que establece normas destinadas a definir la jornada de trabajo de estos profesionales, incluyendo el establecimiento del número de horas a trabajar. “Ni siquiera pensamos en hacerle dejar de ser el profesional que quiere ser”, reflexionó Lula.
“Incluso sancioné ayer un proyecto de ley que se llama Creer, que es el proyecto de ley que más garantizará el financiamiento a los pequeños y medianos empresarios y empresarios; para la cooperativa; para el personal de Bolsa Família que quiera hacer negocios. Recibirán crédito. Será el programa de crédito más grande jamás realizado en la historia de este país, para las pequeñas y medianas empresas, para los pequeños empresarios”, añadió.
Agencia Brasil.-