En un informe explosivo publicado por la Oficina de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, se ha lanzado un urgente llamamiento a la acción internacional para abordar la situación “cataclísmica” que atraviesa Haití.
El documento, que cubre el período comprendido entre el 25 de septiembre de 2023 y el 29 de febrero de 2024, revela una escalada alarmante de corrupción, impunidad y violencia de pandillas que ha llevado al país al borde del colapso. Según el informe, la situación ha dejado a las instituciones estatales debilitadas y a la población gravemente privada de sus derechos fundamentales.
“La corrupción, la impunidad y la mala gobernanza, sumadas a los crecientes niveles de violencia de las pandillas, han erosionado el Estado de derecho y han llevado a las instituciones estatales al borde del colapso”, declaró el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk.
El informe detalla un aumento significativo en el número de víctimas de la violencia de pandillas, con 4.451 muertos y 1.668 heridos en 2023, y un alarmante incremento en los primeros tres meses de 2024, con 1.554 muertos y 826 heridos hasta el 22 de marzo. Además, se resalta el uso de la violencia sexual como táctica de control por parte de las pandillas, con casos desgarradores de mujeres violadas durante ataques de bandas en los barrios.
“Todas estas prácticas son escandalosas y deben cesar de inmediato”, enfatizó Türk.
También destaca la aparición de “brigadas de autodefensa” y la porosidad de las fronteras que permite un suministro constante de armas y municiones a las pandillas, dándoles un poder de fuego superior al de la Policía Nacional de Haití.
Ante esta situación crítica, la ONU hace un llamado urgente a un despliegue multinacional de apoyo a la seguridad para detener la violencia, proteger a la población y restablecer el Estado de derecho en el país. Se subraya la necesidad de integrar los derechos humanos en todas las operaciones de la misión y establecer mecanismos de cumplimiento para minimizar los daños.
“La rendición de cuentas es primordial para restaurar la confianza pública en el Estado de derecho y las instituciones estatales”, agregó Türk.
Por último, se exigen medidas inmediatas y audaces para abordar la crisis humanitaria en Haití, incluyendo un enfoque integral que aborde tanto la seguridad como las causas subyacentes de la violencia y la impunidad.