Durante 61 años el gobierno de Cuba ha insistido con el embargo norteamericano, llamándolo bloqueo, que aplica solo a empresas de EEUU, pero nada impide que empresas extranjeras de otros países se instalen en la isla.
La lista de los principales socios comerciales de la isla es variada e incluye a países como China, España, Canadá, Rusia, México, Países Bajos, Italia, Francia, Alemania, Venezuela y el propio Estados Unidos, de acuerdo con cifras de la Oficina Nacional de Estadísticas e Información de Cuba correspondientes a 2019. No hay embargos sobre medicamentos y material agrícola. Está permitido el envío de ayuda humanitaria, así como la exportación de alimentos.
Actualmente hay en Cuba 302 negocios con inversión extranjera: 104 empresas mixtas, 54 empresas de capital totalmente extranjero y 144 contratos de asociación económica internacional, relacionados con los sectores del turismo, alimentos, energía e industria ligera.
En la actualidad existen 57 proyectos en negociación extranjera por un capital de inversión comprometido de casi 5.000 millones de dólares, lo cual podría producirse dentro de un año, según ha informado la agencia estatal Prensa Latina, tras declaraciones del ministro del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera de Cuba, Rodrigo Malmierca.
Cuba ampliará sus opciones de inversión extranjera en el comercio mayorista y minorista
Las autoridades cubanas anunciaron el lunes que se autorizará la inversión extranjera, tanto en el comercio mayorista y minorista, a través de la formación de empresas, medida dirigida a promover las ofertas a la población.
“Estamos en un escenario complejo que nos obliga a tomar decisiones arriesgadas, que debemos acompañar de medidas de control para que no se desvíen de los resultados esperados”, subrayó la viceministra primera de Comercio Exterior (Mincex), Ana Teresita González, durante el programa televisivo Mesa Redonda.
Las nuevas regulaciones se adoptan en momentos en que el desabastecimiento en el mercado interno de bienes y servicios altamente demandados por la población y el sector privado y cooperativo tiene un impacto negativo en la economía.
También buscan enfrentar los efectos del mercado informal, fundamentalmente en el aumento constante de precios.
Según la funcionaria, estas medidas buscan ratificar el monopolio estatal del comercio exterior para establecer las regulaciones y el control desde el Estado, fortalecer la empresa estatal que realiza comercio exterior, elevando la eficiencia de las operaciones con las formas de gestión no estatales, y continuar creando intencionadamente micros, pequeñas y medianas empresas (Mipyme) estatales que desarrollen la actividad de importación y exportación para la venta de productos al por mayor.
La viceministra primera del Mincex explicó que se trabaja en ampliar el alcance de los negocios de inversión extranjera en el comercio mayorista que ya se encuentran aprobados, y en ofrecer oportunidades de inversión, en primera instancia, a compañías que cuentan con sucursales y oficinas de representación establecidas en la isla.
En el caso del comercio minorista, se promoverá, de manera selectiva, la creación de empresas mixtas con socios de países interesados; mientras que en el comercio mayorista se mantienen las modalidades previstas en la Ley de Inversión extranjera, entre ellas las que son a través de contratos de fondo común y administración de servicios, y empresas de capital totalmente extranjero.
De acuerdo a González, se busca además promover que estos negocios se destinen a la venta de materias primas, insumos, equipamientos y otros bienes que contribuyan a impulsar la producción nacional, así como el suministro de productos alimenticios, de aseo, de línea económica y para instalación de sistema de generación de electricidad.