El presidente de Chile, Sebastián Piñera ha suscrito este domingo el decreto para la primera sesión de la Convención Constitucional donde 155 delegados elegidos de forma democrática comenzarán a redactar la nueva Constitución para la nación austral en reemplazo de la actual Carta Magna que rige en el país desde 1980 y que es legado de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990). El día de la primera sesión de la Convención ha sido fijado para el próximo 04 de julio a las 10:00 a.m. en el edificio del Congreso Nacional en la ciudad de Santiago.
“Hoy estamos convocando a la primera sesión de instalación de la Convención Constitucional, la que tendrá lugar el domingo 4 de julio del año 2021 a las 10:00 de la mañana en el edificio del Congreso Nacional en la ciudad de Santiago”, ha dicho Piñera.
En este contexto trascendió que los delegados constituyentes tendrán el plazo de un año para redactar la nueva Constitución, el cual se divide en nueve meses, prorrogables por tres adicionales, para aprobar el texto final. Una vez aprobado, habrá un plazo de 60 días para realizar un plebiscito que aprobará o rechazará la nueva Constitución.
En este contexto la sociedad chilena espera hacer realidad uno de los principales reclamos dados en el marco del denominado “estallido social” de octubre de 2019, cuando miles de personas salieron a las calles a reclamar mayores derechos y oportunidades en materia de salud, educación y justicia social, entre otros aspectos. Los chilenos consideran que muchos de los desbalances socioeconómicos y políticos de Chile se desprenden de esta Constitución heredada de la dictadura por lo que prevén que la nueva Carta Fundamental sea el puntapié inicial para canalizar las demandas sociales institucionalmente, al tiempo de ser los últimos suspiros del fantasma de Pinochet.
“Representa una gran oportunidad para lograr acuerdos amplios y sólidos, que permitan dar origen a una Constitución que sea reconocida y respetada por todos y constituya un gran marco de unidad, estabilidad y proyección hacia el futuro, para nuestra democracia y nuestra sociedad”, ha expresado en el marco de una ceremonia en el Palacio de La Moneda.
La Convención Constitucional está compuesta por 155 integrantes y de manera paritaria por hombres y mujeres. Además, incluye la representación de los pueblos originarios mediante 17 escaños reservados: Siete para el pueblo mapuche, dos para el pueblo aimara y uno para kawésqar, rapanui, yagán, quechua, atacameño, diaguita, colla y chango.
“Que la historia, nuestra hermosa historia, recuerde a los Convencionales Constituyentes como los constructores de grandes acuerdos y los forjadores de un mejor futuro para Chile”, ha concluido el Presidente.