En Suecia, Rousseff visitará la fábrica de Saab, empresa que firmó un contrato con el gobierno brasileño para la venda de 36 cazas Gripen de nueva generación. La jefa de Estado se encontrará con el rey sueco Carlos XVI el domingo, y cumplirá la mayor parte de los compromisos en el país el lunes (19), cuando tendrá una reunión privada con el primer ministro Stefan Löfven.
Previo a su viaje, la mandataria reiteró su rechazo a las acusaciones de la oposición y a la investigación que busca el juicio político para destituirla por presuntos hechos de corrupción de su gobierno e irregularidades durante su campaña electoral.
Dijo que Brasil está pasando por una “grave crisis política” y que los sectores de la oposición intentan una variante de golpe de Estado “encubierto” con el fin de conseguir un atajo para llegar al poder.
Aseguró que jamás tuvo un desvío de conducta en su vida personal y política.