Kinokuniya es el nombre de la librería japonesa que cuenta con 66 sucursales y se las ha ingeniado para obtener un contrato prácticamente exclusivo de distribución de los trabajos literarios del escritor Haruki Murakami, desplazando a Amazon a un segundo plano.
El objetivo de esta librería japonesa es que el conjunto de ensayos sea comprado en un mostrador y no vía Internet, para lo cual ha conseguido el 90% de la primera edición de Shokugyō to shite no shōsetsuka (El novelista como vocación, en su traducción literal) la nueva obra de Murakami, un exitoso autor tanto en Japón como en la escena internacional.
La cadena Kinokuniya, que cuenta con más de 60 tiendas en su país y otras 26 repartidas en tres continentes, ha decidido hacerse con este porcentaje de la primera edición japonesa para “revitalizar el mercado de distribución de libros” en establecimientos físicos y competir con los minoristas de venta on line, según publica en un comunicado. La corporación asegura que cuenta con el apoyo de otras librerías y que su propósito es que la obra de un superventas como Murakami esté disponible en “tiendas de ladrillo y mortero”, y no solo en comercios virtuales.
Volver a los orígenes
“El hecho de que las librerías físicas hayan estado en el mercado por siglos, no significa que este sea un formato obsoleto para servir a las necesidades de los ciudadanos del siglo XXI”, señala desde Tokio Hiroshi Sogo, director de Desarrollo de Negocios Internacionales de Kinokuniya. “Una tienda de este tipo ofrece a los clientes la posibilidad de sumergirse en un ambiente libresco. Los minoristas en línea no han llegado tan lejos para poder replicar la misma experiencia”, agrega.
Un comprador de este libro es un cliente potencial de muchos otros en una tienda física. Si los consumidores no tienen que visitar la librería, todas esas compras posibles se malograrían. Kinokuniya quiere evitar que una avalancha de reservas en sitios web aleje a los clientes de sus locales. No obstante, el libro estuvo las dos semanas pasadas entre los diez primeros en la lista de ventas de Amazon.co.jp.
“El caso de Murakami es especial en Japón. No es probable que una editorial le ofrezca el 90% de un bestseller a una sola tienda“, señala Sydney Davies de la Asociación de Vendedores de Libros del Reino Unido, destacando un modelo similar para Europa o Estados Unidos.
Según analistas internacionales, el mercado internacional de publicaciones es muy diferente al de Japón y los acuerdos exclusivos o semi-exclusivos pueden acarrear problemas, algo que no enfrenta la librería japonesa en cuestión en su país.