El vicepresidente de Bolivia, Álvaro García Linera aseguró que en el fallo emitido por la Corte Internacional de Justicia de La Haya (CIJ), el pasado 24 de septiembre, en los antecedentes, reconoce que Bolivia nació a la vida independiente con acceso soberano al mar y que existen asuntos no resueltos con Chile.
“Al momento de su independencia, Bolivia tenía una costa marítima a lo largo del océano Pacífico, con una extensión de cientos de kilómetros”, leyó parte de la traducción, no oficial del fallo, el presidente en ejercicio para luego afirmar que se trata de “una frase demoledora frente a los argumentos que habían manejado gobiernos chilenos anteriormente respecto a que Bolivia no tenía salida al mar”.
En esta línea el representante de gobierno aseguró que esta afirmación tiene una fuerte incidencia en la opinión pública de la ciudadanía chilena, ya que muchos de los habitantes de este país “creyeron que Bolivia nunca tuvo mar y que la demanda marítima “era un conflicto inventado y que Chile solo había ejercido soberanía sobre su territorio en Atacama y el Pacífico”.
De la misma forma García Linera argumentó en un comunicado de prensa que en la parte final de fallo: “los asuntos en controversia son asuntos que no fueron resueltos por acuerdo entre las partes, o por laudo arbitral, o por decisión de un tribunal internacional, ni regidos por acuerdos y tratados en vigencia a la fecha de celebración del Pacto de Bogotá”.
Esta situación -a juicio de Linera- desmiente la postura entregada por Chile, la que señalaba que entre ambas naciones no había asuntos pendientes, que todo había quedado resuelto con el Tratado de 1904.
Ante esto el vicepresidente boliviano aseguró que estos argumentos marcarán la pauta y las directrices del debate a futuro en esta materia, además de que “demuelen el núcleo sustancial de la defensa que tuvo el gobierno de Chile en la Corte de La Haya y tendrán que pensar en una nueva estrategia”.
“La CIJ considera que los planteamientos de Bolivia son procesables por ella, frente a los argumentos de Chile que consideraba que no eran procesables y que no era competente. Le hemos propiciado una derrota a Chile, de carácter histórico y moral, y sus argumentos se derrumban”, complementó.