Cuatro de los ex presos de Guantánamo refugiados en Uruguay (Fotos: ICN Diario)El sirio Abu Wael Dihab (también llamado Jihad Ahmed Dhiab), exrecluso de Guantánamo que recibió refugio en Uruguay, ha anunciado que se sentará frente a la embajada de Estados Unidos en Montevideo y realizará una nueva huelga de hambre, ya que se siente que lo que se le brinda es insuficiente, según ha declarado al diario norteamericano Washington Post en un artículo titulado: “Después de años en Guantánamo, ex detenidos encuentran poco consuelo en Uruguay”.
Abu Wael Dihab cuando estaba preso en Guantánamo, había realizado durante dos años una huelga de hambre hasta que un juez obligó a que lo alimentaran por la fuerza. Abu Wael Dihab ( también llamado Jihad Ahmad Diyab) Foto: Barricada TVHoy dice que siente que las promesas hechas a él han sido traicionadas. Él ya no acepta el estipendio de 600 dólares por mes que le entrega el gobierno uruguayo y ha dejado de ir al hospital a pesar de una larga lista de problemas de salud. Él no tiene ingresos, teléfono o las perspectivas de empleo. Él predice que los tomates, pepinos y patatas pueden durar un par de semanas más, y cuando ya han ocurrido, él tiene un plan. “Cuando se acaben, empezaré la huelga de hambre”, dijo al diario Washington Post: “Iré y me sentaré frente a la Embajada de Estados Unidos”, aseveró.
Los seis ex reclusos de Guántanamo viven en una finca de dos pisos proporcionada por el sindicato de trabajadores PIT-CNT en Montevideo y se anuncia que recibirán otra dotación de dinero de una oficina de la ONU. Hasta el momento han rechazado varias ofertas de trabajo que les han hecho llegar.
Abu Wael Dihab cree que ha sido traicionado en las promesas que le hicieron y exige que se le otorgue una casa propia y que traigan a su familia deede Siria además pide dinero suficiente para vivir con dignidad y comenzar un negocio. En este sentido reclama que Estados Unidos asuma su responsabilidad por haberlo mantenido captivo por más de una década y luego liberarlo con una carta que expresa que no tuvo ninguna participación en “conducir o facilitar actividades terroristas”.
“¿Quién es el culpable de que mi esposa y yo vivamos en el infierno?”, se preguntó Dhiab y se respondió: “Estados Unidos”.