Nicolás Maduro ha escrito un artículo en inglés (?) titulado: Un llamado a la paz desde Venezuela, para publicar en el periódico de EE. UU. New York Times de donde extraemos algunas frases que merecen ser conocidas.
El inefable Maduro señala entre otros conceptos que, “Los venezolanos nos sentimos orgullosos de nuestra democracia”, o esta otra que dice: “Hemos creado un Consejo de Derechos Humanos para investigar todos los incidentes relacionados con estas protestas”, lo único que sólo van presos los manifestantes pero ninguno de los que reprime.
Pero una de las citas del mandatario que no tiene desperdicio es: “En Venezuela, hemos extendido la mano a la oposición”; claro, eso para él es lógico, con la mano extendida se golpea mejor a un opositor.
“Venezuela necesita paz. Venezuela necesita el diálogo, y Venezuela tiene que seguir adelante. Damos la bienvenida a cualquier persona que sinceramente quiera ayudar a alcanzar estos objetivos”, dice Maduro, pero no aclara que si esa persona aparece, la meten presa por subversiva.
A continuación las frases más destacadas de Maduro, que sólo él y su entorno creen.
-“Las recientes protestas en Venezuela han llamado la atención de la comunidad internacional. Gran parte de la cobertura en los medios de comunicación internacionales ha distorsionado la realidad de mi país y los hechos de actualidad”.
-“Los venezolanos nos sentimos orgullosos de nuestra democracia. Hemos construido un movimiento democrático y participativo desde la base que ha asegurado que tanto el poder y los recursos sean distribuidos de manera equitativa a nuestro pueblo”.
-También hemos creado emblemáticos programas sociales de salud y educación, gratuitos y accesibles a todos los habitantes de nuestro país. Hemos logrado estas extraordinarias hazañas sociales en gran parte a través de la redistribución y el uso de los ingresos procedentes del petróleo venezolano”.
-“Adicionalmente, Venezuela ha sufrido con una alta tasa de crimen que estamos combatiendo directamente a través de la creación de un nuevo cuerpo de policía nacional, fortaleciendo la cooperación entre las comunidades y la policía y la reforma de nuestro sistema penitenciario”.
-“La participación popular en la política en Venezuela se ha incrementado dramáticamente en la última década. Como un ex sindicalista, creo profundamente en el derecho de asociación y el deber cívico de manifestar preocupaciones legítimas a través de la protesta pacífica con el fin de garantizar que la justicia prevalezca”.
-“Después de dos meses, 36 personas han sido asesinadas. Los manifestantes son directamente responsables por más de la mitad de las víctimas mortales. Seis miembros de la Guardia Nacional han sido asesinados; otros ciudadanos han sido asesinados al intentar eliminar los obstáculos colocados por los manifestantes para bloquear el tránsito”.
-“Una pequeña minoría de funcionarios de las fuerzas de seguridad también han participado en actos violentos, y varias personas han muerto como resultado. Estos son eventos ilegales y lamentables, y el gobierno venezolano ha respondido arrestándolos”.
-“Hemos creado un Consejo de Derechos Humanos para investigar todos los incidentes relacionados con estas protestas. Cada víctima merece justicia, y cada autor – ya sea un defensor o un opositor al gobierno – tendrán que rendir cuentas por sus acciones”.
-“Ahora es un momento para el diálogo y la diplomacia. En Venezuela, hemos extendido la mano a la oposición. También hemos aceptado las recomendaciones de la Unión de Naciones de América del Sur para que participen como testigos del diálogo con la oposición”.
Una dictadura
Tal vez Maduro crea que la comunidad internacional es tonta y que no ve las barbaridades de un régimen que ya es una dictadura, con cómplices obsecuentes que sin la mínima vergüenza salen a defender lo indefendible, como la ministra de Comunicación, Delcy Rodríguez, que escribe en su cuenta de Twitter “Maduro: Líderes de la oposición no están listos para el diálogo. Tienen miedo,saben que su proyecto no es democrático”. ¿Qué sabrá de democracia la ministra si el gobierno que ella integra, pisotea hasta los más elementales derechos del pueblo? Para dar lecciones de democracia, hay que ser demócrata y en el gobierno chavista, parece no haber ninguno.