El Tribunal Primero B de Mayor Riesgo, presidido por la jueza Jeannette Valdés, emitió la sentencia condenatoria tras hallarlo culpable de la muerte de 37 personas durante el incendio en la sede diplomática y el posterior asesinato de dos estudiantes universitarios, dos de los hechos más cruentos durante el conflicto armado interno que vivió Guatemala durante 36 años.
Durante el juicio se estableció que el incendio fue provocado por el colaborador de García Arredondo, Rodolfo Cruz, quien portaba un cilindro de gas durante el hecho. La sentencia fue emitida por los delitos de asesinato, asesinato en grado de tentativa y delitos contra los deberes de la humanidad.
La Fiscalía guatemalteca en su acusación formal pidió una condena de 1.250 años contra García Arredondo, el único acusado en la causa; 30 años de cárcel por cada una de las víctimas mortales, 40 años por la tentativa de muerte contra dos sobrevivientes, entre ellos el exembajador español, Máximo Cajal.
Además, solicitó 30 años de prisión por cada uno de los dos estudiantes asesinados durante el funeral de las víctimas en febrero del mismo año. El debate oral y público contra el exdirector de la PN se inició el 1 de octubre del año pasado y la semana pasada llegó a su etapa de conclusiones.
Las pesquisas dieron cuenta de que la masacre en la Embajada fue perpetrada por las fuerzas de seguridad del gobierno militar del general Romeo Lucas García, tras ser ocupada por campesinos y estudiantes guatemaltecos que se manifestaban en contra de la represión del Ejército.
En el siniestro murieron quemadas 37 personas, entre ellas Vicente Menchú, padre de la premio Nobel de la Paz, Rigoberta Menchú, además del cónsul Jaime Ruiz del Árbol Soler y los trabajadores Luis Felipe Sanz y María Teresa Vásquez, todos de origen español.
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