Quito, (Andes).- Un total de 264 instalaciones militares de 561 que existen en Ecuador se transformarán en parques, proyectos inmobiliarios, hospitales, áreas turísticas y escuelas, informó este miércoles la ministra de Defensa, María Fernanda Espinosa.
Estas restructuraciones se enmarcan en el proceso de reforma y modernización por el que atraviesan las Fuerzas Armadas ecuatorianas y contempla la unificación, equipamiento y homologación de instalaciones militares, entre unidades, destacamentos y recintos.
La ministra Espinosa dijo a la prensa que las infraestructuras militares serán entregadas a la empresa Inmobiliar, encargada de las edificaciones públicas, para que defina los usos que se les dará en favor de la comunidad.
Entre los proyectos que se contemplan está la construcción de hospitales, unidades educativas, parques, sitios turísticos, áreas naturales, incluso se estudiará la posibilidad de que algunos predios sean comercializados.
Entre los sitios que serán reubicados próximamente, la ministra Espinosa destacó aquellos considerados prioritarios como la I División del Ejército en el cuartel Eplicachima, en el norte de la capital, donde será construida la plataforma política de gobierno, la cual acogerá el nuevo despacho del Ejecutivo y otros ministerios.
El costo de estas reubicaciones es de 219 millones de dólares, de los cuales 163 serán destinados a bloques de infraestructura y 56 millones para edificación de dormitorios.
Para la construcción de las instalaciones, las Fuerzas Armadas aprobaron un manual que permitirá la homologación de las infraestructuras.
La funcionaria informó también que se ha planificado la reubicación de tres polvorines de las Fuerzas Armadas fuera del área urbana, de los cuales dos ya fueron adecuados y cuentan con altas seguridades para evitar eventualidades.
El coronel Luis Garzón, jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas (CC.FF.AA), puntualizó que las infraestructuras militares destinadas al cordón fronterizo norte no serán tocadas y se continuará con el trabajo que se realiza en esa zona del país, donde existe presencia de grupos irregulares colombianos y delincuencia transnacional.
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